Publicidad y Contenidos

Usar la televisión y el cine para buscar nuevos mercados para pautar se está convirtiendo en la visión de muchas marcas quienes han visto que patrocinar programas de televisión y largometrajes puede ayudarles a llevar la imágen de su marca de una manera más cercana al espectador. Y a través de contenidos de interés, y no sólo a través de la las fanjas comerciales que muchos obviamos a través del zapping.
Los mercadólogos deben encontrar la forma más certera para insertar su marca en un trabajo audiovisual, y los realizadores y productores deberán proponer a los anunciantes espacios privilegiados, pero a la vez inteligentes para introducir las marcas. No es nada nuevo el "product" o "brand" placement, pero no se ha utlizado de buena manera.
El problema radica en que las marcas no ven en la programación regular una oportunidad de exposición, contrario a lo que ocurre en otras latitudes, como Argentina, Estados Unidos y Europa en donde las marcas se pelean por ser parte de la imágen de largometrajes y programas especializados en la programación televisiva.
Los realizadores tampoco han vendido bien la idea y deben basarse en resultados reales y proyeciones para proponer y ofrecer a las marcas.
Entonces vale la pena ponernos a pensar en productos audiovisuales que puedan ser del agrado de las marcas, sin caer en el absuso y "clichés" para introducirlas.
Buscar nuevas fuentes de financiamiento y convencer a los financistas está en la mesa listo para ser negociado.

Diversificación y el mercado audiovisual

Últimamente he comentado sobre las oportunidades que se están presentando en el mercado nacional e internacional relacionado con el audiovisual. Sin embargo no está de más agregar que este fenómeno se debe a la diversificación de los mercados, medios y formatos que la industria nos ofrece y el público está dispuesto a consumir.
La tecnología juega un papel preponderante en la diversificación y creación de nuevos espacios y mercados, y la era digital nos depara muchos por no decir cientos de maneras y formatos para expresarnos. Por poner un ejemplo, esta semana en Estados Unidos dejó de existir la televisión análoga para convertirse completamente en señal digital. Esta señal digital muy pronto abarcará todos los mercados, incluso el del cine, y lo hace ya en la telefonía celular y ahora en la televisión.
Este cambio o avance tecnológico, nos muestra que los medios se están extendiendo y debemos poner énfasis que en la variedad de nuestras propuestas audiovisuales, está probablemente la receta del éxito. Ahora podemos hacer cualquier tipo de audiovisual, con nuestro celular o con un equipo más sofisticado, y encontrar un espacio de difusión como Youtube, en el que prontamente podremos incluso hasta cobrar por cada vez que sean vistos.
La televisión digital también necesitará de mucha programación y las empresas de telefonía celular buscarán muy pronto de manera desesperada contenidos para ofrecer a sus clientes que en distintos idiomas, culturas y niveles de consumo, buscarán lo que más se adapte a sus necesidades.
Es por ello que al pensar en producir cine, televisión y audiovisuales en general, debemos pensar desde un principio para quiénes está diseñado y a través de qué canales lo haremos llegar. En la distribución masiva pero dirigida de nuestros materiales, se encuentra la respuesta a las tan esperadas recompensas económicas.
Diversificar nuestra propuestas creativas, es la manera más sensata y segura de atraer nuevas y mejores inversiones. No poner todos los huevos en un mismo canasto y diversificar el riesgo creando una "portafolio de inversión"

Oportunidades a la vista

Intentaré mantener una continua comunicación y abrir un espacio de expresión para el cine y la industria audiovisual centroamericana a través de la web y este blog, por lo que esta semana me gustaría comentar un poco sobre nuevos espacios que se abren ante nosotros, a pesar de las dificultades que atravesamos.
Empiezo diciendo que depende de cada uno de los realizadores, productores, guionistas y demás actores del medio cinematográfico y televisivo, que una obra o conjunto audiovisual se realice. Sin embargo, también es justo y necesario mencionar que los exhibidores, distribuidores y canales de televisión abierta, por cable y vía satélite, deben crear mejores condiciones. Proveer de las herramientas y contactos, así como invertir en producción independiente o interna, para que su negocio siga teniendo mejores frutos y mejore su calidad. De igual manera para que los contenidos puedan variar y enriquecerse con el trabajo y creatividad de los profesionales y nuevos talentos. Pero mientras estos no vean las posibilidad de crecer no sólo en el mercado local, si no internacional, la batalla será algo difícil.
No existe un espacio, medio o institución que permita y promueva la producción nacional así como su sostenibilidad. Tampoco nos hemos concentrado en la atracción de inversión extranjera, que apoye e incentive el trabajo de los guatemlatecos. Es más, mucho del trabajo audiovisual que se hacía hace algunos años en el país, está migrando por el "malinchismo" o poco interés de clientes en apoyar la producción (en especial la publicitaria).
Es por ello que urge reactivar el marcado y la industria audiovisual. Es necesario y urgente que nos equipemos de la más alta tecnología para brindar mejores y más eficientes servicios; que nos capacitemos y volvamos los ojos a lo creativo, para así ser verdaderamente productivos. Que nos propongamos aprovechar el momento que el audiovisual vive a nivel mundial y tomemos partida de ello. Subirnos a la curva de crecimiento que el mercado mundial está experimentando o nos quedaremos varados esperando que este llegue a nosotros.
Es momento de cambiar, nuevos mercados y oportunidades se están abriendo y la oportunidad de atraer inversión extranjera se refelja en el simple hecho que esta año la academia, haya reconocido el trabajo de Slumdog Millionaire, con 7 "Oscares". A mi parecer una buena obra, pero más importante es leer el mensaje que nos han dado. La Academia y Hollywood, necesitan reducir sus costos de producción y seguir haciendo "Blockbusters" a un menor costo. Además, con estos premios Hollywood, deja la puerta abierta y reconoce la posibilidad de hacer cine en otro idioma(y ya el público de Estados Unidos lo acepta), con actores no reconocidos y nuevas estéticas que caracterizan nuestro trabajo.
Las oportunidades para el cine y la televisión están allí y somos nosotros los responsables en aprovecharlas y hacer confluir a las partes involucradas e interesadas en una misma línea, que permita un desarrollo en esta época de dificultades pero de grandes oportunidades.

El cine en tiempos de crisis

Pareciera que la crisis ha llegado a todos lados, todos los ámbitos y todas las clases. Por todas partes vemos con rostro horrorizados a empresarios, grandes, medianos y pequeños, trabajadores formales e informales, que no saben con certeza hacia dónde nos llevará y cómo poder salir de esta pequeña debacle económica creada por los grandes poderes económicos mundiales. Sin embargo, como en toda crisis hay grandes oportunidades y el cine no se queda atrás. Ya durante la gran depresión en Estados Unidos el cine tomó auge y sirvió de catalizador para aquellos que querían ver algo distinto, divertirse o reflexionar, en una época de profunda incertidumbre. Una época de gran creatividad que sirvió para el surgimiento de nuevos géneros cinematográficos y aumentar la asistencia de público a las salas.
Ese momento puede ser el que nuestra región y el mundo estén viviendo. Por varios lados se escuchan proyectos que se están planificando, preparando y rodando. Así que algo muy particular debe estar sucediendo, porque el arte y el cine, no han descansado e incluso su producción ha aumentado, quizás por la misma necesidad de expresarse, ahora que no hay límites para la expresión personal y del colectivo.
¿Es este entonces un momento para invertir en cine? Podríamos decir que en un momento en que las inversiones e inversionistas necesitan de nuevos mercados y productos novedosos para ver resultados, el audiovisual puede ser una respuesta concreta.
Talvés haya llegado el momento de tomarnos el cine y el audiovisual de manera más conciente y dejar atrás la concepción de hacer cine, por hacerlo. Hay que crear y hacer cine para que otros los vean. Buscar los mercados es nuestro reto.